Toño Rodríguez, de La Era de los Nogales, recibió el galardón al cocinero más innovador.
y el consejero Joaquín Olona | Aránzazu Navarro
Al acto asistieron 130 invitados y durante el mismo se disfrutó de una pequeña degustación gastronómica. Más bien fueron dos catas. La primera, de la cerveza Morena de Ambar. Además, Alicia Sánchez, de la empresa Dulces Locuras, ofreció una degustación de gominolas con alcohol.
El actor y humorista Javier Segarra presentó la gala y dio paso al director del área de Negocio en Caja Rural de Aragón, Óscar Pérez. Antes de dar los premios, la cata del director de comunicación de Ambar, Enrique Torguet, contribuyó a refrescar la calurosa tarde.
El premio a la trayectoria gastronómica, fué para el propietario de El Chalet, Ángel Conde. El chef se acordó de «los cocineros de barrios y pueblos que no tienen la oportunidad de recibir reconocimientos así».
También habló de su trayectoria gastronómica representando a Aragón en muchos lugares, realizando cursillos en pueblos o formando a jóvenes. Pero sus palabras más emotivas fueron para los damnificados de una profesión tan sacrificada. «No he podido disfrutar de la familia como me hubiera gustado, así que para ella también va el premio».
Para Chus Blasco y Manuela Delgado, fundadoras de ‘El curioso caso del sesgo de la croqueta’, en el que se combinan inteligencia artificial y emocional, fue el galardón al proyecto digital gastronómico. Manuela comentó que esta iniciativa «se ha basado en las emociones que nos transmiten los alimentos de Aragón».
Por su parte, Chus Blasco, propietaria de Entalto, destacó la necesidad de «tener una inteligencia emocional potente para no olvidar que somos humanos y no podemos dejarnos manipular por una máquina». La jefa de Desarrollo Corporativo de Mercazaragoza, Alejandra Beortegui, les entregó el reconocimiento.
Hasta Huesca viajó el premio al cocinero más innovador, que recayó en el chef del restaurante La Era de los Nogales, Toño Rodríguez. Su apuesta por la creatividad ha sido una constante en su trayectoria, y ahora la desarrolla en Sardas, un pueblo de 37 habitantes. «Esto es para mi familia y mi equipo, que han conseguido que seamos un sitio de peregrinaje». El premio lo entregó Sergio Muñoz, director comercial de Aragón Media Lab.
El mundo del vino estuvo presente con el galardón que recibió Garnachas Históricas Project y que recogió el presidente de la denominación de origen Campo de Borja, Eduardo Ibáñez, de manos jefe de ventas de la zona noreste de Grupo Macho, Ángel Aznar. «Esta iniciativa es importante para preservar las garnachas más viejas y hacer con ellas vinos de gran calidad de la mano de las universidades de Zaragoza y Navarra con las que colaboramos», comentó.
El siguiente reconocimiento fue para la empresa más sostenible en el ámbito de la gastronomía, que recibió el hotel boutique La Torre del Visco. Se lo entregó el jefe de comunicación de Coca Cola, Fernando Anel. Rubén Catalán, jefe de cocina del Visco, agradeció la distinción y mostró el compromiso de su propietaria, Jemma Markham, para seguir trabajando en la misma línea que se refleja en detalles como el eslogan ‘Del campo a la mesa’.
Los últimos galardones fueron para la pastelería oscense Lapaca, que recogió el premio al fenómeno gastronómico. El maestro pastelero, Raúl Bernal, mostró su satisfacción por recibir este reconocimiento en Aragón que le entregó Óscar Pérez.
Finalmente, la última mención se concedió bajo la denominación premio a la gastronomía sin límites y fue para la Fundación San Blas para Personas sin Hogar en Aragón. ¿Por qué no ayudar a los que menos tienen para conseguir su inserción sociolaboral? Esta pregunta ha motivado la puesta en marcha de cursos de cocina y de camareros. «Necesitamos que los hosteleros apostéis por estas personas que están formadas para empezar a trabajar», pidió el presidente Antonio Borraz. El premio se lo entregó el vicepresidente de HERALDO, Fernando de Yarza.
El cierre llegó de la mano del director de Heraldo de Aragón, Mikel Iturbe, que agradeció a los premiados y a los patrocinadores su apoyo y el trabajo realizado.
Fuente: Heraldo de Aragón